ACTIONMAN4X4

EL RIO VERDE.  O EL DÍA DE LOS DESPISTES

(25 de julio de 2009)

 

Hicimos este descenso:

    Novatos: Manolo, Teresa, José , Isa.

    Del K.P.E.: Félix, Pako, Isa, M.A. Nani y Juan

    Por primera vez en el Río Verde: Tete, Lorena y José Ángel

    Y recordando viejos tiempos: Tato y Pablo, hijos de Nani

 

    La noche del viernes durante la cena ya se presagiaba que íbamos a tener un descenso calentito. Y efectivamente así fue. El calor dominó todo el descenso y desde muy temprano.

   

    Primer despiste: Nani no pone el despertador y nos atrasamos algo, pero sobre las 7’30 horas estamos casi todos en la gasolinera BP del cruce de la Malahá. Desayunamos, compramos algunas cosillas y tiramos para la entrada del Río Verde donde nos espera Félix, que viene de Málaga por la carretera de la costa.

 

    A las 9 en punto estamos todos en la pista de entrada y bajamos con los coches para dejar los equipos y a todos los que no van a participar en la operación “movida de coches”

 

    Segundo despiste: Félix se ha dejado las botas. Menos mal que Juan llevaba unas zapatillas y pudo hacer el barranco

 

    Manolo, Juan, José Ángel y Tato cogen sus coches y nos dirigimos a la pista de salida para situar allí tres de los cuatro coches que llevan.

 

    Llegamos a la cancela del peaje de la Cooperativa de Cázulas y... ¡¡¡¡Joder!!!! Aquello está “empetao”. Un montón de coches bloquea la entrada a la pista y hay un coche de la Benemérita allí mismo. ¿Pero qué coño pasa aquí?, nos preguntamos. Nos acercamos a la caseta y ¡¡¡¡¡ más sorpresas!!!! Hay un Guardia Civil dentro de ella. Esto se pasa de castaño oscuro. Al final hablamos con el “peajero” y nos dice que no pasa “ná”, que le aflojemos la pasta y p’adentro. Y así lo hacemos.

 

    Bajamos la pista, situamos los tres coches y nos volvemos en el de José Ángel, que aparcamos en la entrada de la pista. Bajamos andando hasta la Fuente de la Cabrerizas y allí nos encontramos al resto del grupo que lleva dos horas y pico esperando. Cosas que pasan por hacer el descenso integral.

 

    Nos vestimos y sobre las 12’15 empezamos el descenso.

 

    Tras la homilía de rigor de Juan a los novatos sobre las precauciones que han de adoptar durante el descenso llegamos al primer rappel, el cual pasamos sin novedad.

 

    Tras en acostumbrado bautizo de los novatos en el final del Barranco de Funes, hacemos el primer salto, que algunas de las “sirenitas” barranqueras optan por no hacer.

 

    Aprieta el calor... Bueno, que si aprieta. Menos mal que se nubla un poco, porque si no nos vemos haciendo el barranco en “tanga”

 

    Tras aprender los novatos que a Juan no se le puede dar la espalda en un barranco acuático, llegamos al gran tobogán y Pako monta la cuerda hasta la mitad. Así la gente puede hacerse la foto de rigor y hacer la mitad del tobogán. Gran idea la de Pakillo.

 

    Algunos prueban eso de echar adrenalina por el ano haciendo el salto de 12 metros. De los novatos solo Lorena declina hacer el salto.

 

    Llegamos al rappel de la “Y” y hacemos un “peaso” de sesión fotográfica, especialmente para los que bajan este barranco por primera vez.

 

    Un pequeño alto para comer algo y continuamos la segunda parte.

 

    De repente Manolo comenta que se ha dejado las llaves en el coche de José Ángel. Y los demás hemos dejado todas las llaves dentro del suyo. No puede ser..., es coña, pensamos todos. Manolo insiste, pero como el tío se sonríe pensamos que está de coña. Es que de ser así, cuando lleguemos al final no podremos abrir ningún coche. Que no, que es coña de Manolo...., pensamos.

 

    Llegamos a un rappel y Juan se acuerda que en su base hay una cueva en la que caben hasta tres personas. Así que preparamos la broma del “pez polla” y a todo el que baja le metemos un susto de muerte. Bueno..., algunos se lo olieron por el cachondeo que teníamos abajo.

 

    Así poco a poco nos vamos acercando al final. A alguno/a ya le pesan las piernas. Llevamos casi 6 horas de barranco y ha hecho bastante calor.

 

    Llegamos al final y podemos ver el tremendo desastre que hizo la riada de septiembre de 2007. Lo que era un idílica playita con árboles ha quedado absolutamente arrasada. Ahora es una enorme zanja de cinco metros de profundidad por 15 de ancho. Una lástima. Tan impresionados nos quedamos que no caímos en hacer fotos del destrozo.

 

    Por fin a las 18’15 h llegamos a los coches, molíos, acaloraos y hambrientos.

 

    Y entonces se confirma lo peor: tercer despiste del día: lo de las llaves de Manolo es verdad, no es coña. La comida, la ropa seca etc... todo está en los coches y no los podemos abrir.

 

    José Ángel aprovecha que pasa un coche y le pide que lo acerque hasta arriba. Nada más irse se produce el cuarto despiste del día: Juan recuerda que lleva una llave de emergencia y José Ángel ya se ha ido, el pobre.

 

    Total que abre su coche y Tato con una “llave de madera” consigue abrir el de Nani. Bueno, al menos podemos comer y algunos cambiarnos.

 

    En fin mas vale tomarse esto a coña. Sobre las ocho de la tarde aparece José Ángel y tras darle 5 minutos para comer algo, nos vamos despidiendo con la promesa de que esto se repetirá pronto.

 

    En resumen: descenso muy relajado(6 h), ausencia de Charlies ( a pesar de que presagiábamos lo contrario), buen ambiente (como siempre), bastante calor, y una anécdota ( la de las llaves) que contaremos dentro de varios años…

 

    ¿Y los novatos. Pues se portaron como campeones. Sobresaliente cum laude

 

ACTA DE CONSEJO DE GUERRA

 

    En Cádiz siendo las 11 h. del día 27 de julio de 2009, se reúnen en Consejo de Guerra sumarísimo los miembros del Komando Payoya Extreme para juzgar los hechos acaecidos durante el descenso del Río Verde el día 25 de julio.

   

Actúa como Presidente de Sala el Excmo. Coronel D. Juan Canón “Actionman4x4”, como Fiscala Acusadora y Chivata la Capitana Dº Isabel Ayaso “La Xhurri” y como Defensor del acusado, el Comandante D. Pako García “Superpatxi”, siendo el acusado D.Manuel Vallejo “El Chicla”

 

RESULTANDO

 

    1.- Que el día de autos El acusado D. Manuel Vallejo, alias “el Chicla”, en un despiste dejó las llaves de su coche en el coche que se quedaba en la entrada del Río Verde en lugar de llevarlas consigo.

 

    2.- Que a consecuencia de ello y habida cuenta que las llaves de los demás coches habías sido depositadas en el coche del acusado, los miembros del KPE así como los otros deportistas que les acompañaban no pudieron tener acceso a las sabrosas viandas, ropa seca y media docena de cervezas frías que  se encontraban dentro de los vehículos citados.

 

    3.- La Fiscala Acusadora ilustra al Tribunal sobre los múltiples padecimientos físicos y psíquicos que padecieron los afectados: síndrome de abstinencia al lúpulo y la cebada, (lupulitis), hambre, sed, humedad, picores diversos, etc…, lo cual acredita mediante informe médico del Hospital de Veteranos de la 2ª Guerra Mundial.

 

    3.- Que el Abogado Defensor alega a favor del acusado que era novato, que su estado de agitación nerviosa (léase cagalera mental) le impedía un uso normal de sus facultades intelectivas, que el resto de los afectados depositó las llaves en su coche sin que él se ofreciera a ello, que ha dado evidentes muestras de arrepentimiento y propósito de enmienda, que se ha declarado culpable del hecho y que públicamente se ha disculpado, solicita de le tengan en cuenta como causas de limitativas de la responsabilidad del acusado

 

CONSIDERANDO

 

    Único. Considerando que siendo los hechos imputados al acusado son de una gravedad extrema al privar por su conducta distraída a sus compañeros del consuelo de unas frescas cervezas Alhambra 1925, de una muda de ropa seca así como de la ingesta de viandas reparadoras  tras la realización del barranco, este Tribunal, sin embargo, ha de hacer suyas las alegaciones del Defensor y estimar que en el presente caso se dan circunstancias que  limitan la responsabilidad del imputado tales como el arrepentimiento espontáneo, su falta de experiencia previa, el ofrecimiento de “motu propio” a la reparación de los daños físicos y psicológicos producidos a los afectados, así como propósito de enmienda para futuras ocasiones.

 

ESTE TRIBUNAL ACUERDA

 

    Que debemos condenar y condenamos a D. Manuel Vallejo, alias “el Chicla” por una fala de despiste monumental a la pena de abonar de su pecunio personal una ronda de cervezas Alambra 1925 a los afectados en el presente caso haciéndole saber que dicha pena deberá cumplirse inexcusablemente antes o después del próximo barranco que realice con los afectados y que contra la presente sentencia no cabe recurso alguno.

 

    Así lo ordeno en Cádiz a 27 de julio de 2009

 

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