ACTIONMAN4X4
I KOCIDO PAYOYO
NO SOLO DEL MONTE VIVE LA PAYOYA.
( 30 de enero de 2010)
¡Vaya invierno que llevamos! ¡Que mierda de tiempo! Lluvia, viento, frío... En fin, ya mejorará, digo yo. ¿Qué hacemos este finde? ¿Bicicleta? ¿Más montaña? ¿Barrancos? ¡Huy no, qué frío!. ¿Entonces? Oye... y ¿por qué no hacemos una KDD para comernos unos de esos legendarios cocidos que hace Juan?
Dicho y hecho. Tras citación al grupo nos vemos en el ranchito de Nani las/los siguientes payoyos:
- Paco e Isa
- Fer
- Marikilla
- Salud y Juan (el cocinero)
- Nani, Nano y Mª José.
- José Luis y sus hijas Laura y Marta, The Valentin’s Girls
- Manué de Chiclana
- Maribel, que se incorpora hoy al grupo
Sobre el mediodía llega el grueso del grupo y Juan se apresura a poner el cocido al fuego porque dos horitas de cocción no se las quita nadie. Mientras Fer y Marikilla se hacen una ruta en bicicleta los demás llevamos a los que no conocían el ranchito a ver las tumbas antropomórficas que hay en el. Paco, Isa y salud deciden quedarse al cuidado de la criatura (léase cocido), mientras los demás potreamos un poco por los alrededores.
Nani nos acerca primero la Mirador. Ya en el camino de subida Laura, la pequeña ardilla, apunta maneras de montañera. Toma la cabeza del grupo y nos lleva hasta arriba.
Hace un día muy despejado y se ve perfectamente la playa de Los Lances, Tarifa y Marruecos. Y por el otro lado la playa de Bolonia y el faro de Punta Camarinal
Nos hacemos la oportuna sesión de fotos y enfilamos hacia la Cueva del Contrabandista, objetivo final de este potreo campero.
Tras visitar esa curiosa cueva, decidimos subir a lo más alto de la roca para que las niñas disfrutaran de una sesión de escalada light.
De vuelta al ranchito ya se aprecian los olores de ese cocido que bulle en la olla. Marikilla y Fer ya vuelto de su ruta en bici y como es habitual, Marikilla tiene un hambre que se come las piedras.
Salud y Juan organizan el cocido y ayudados por Fer hacen el reparto. ¡¡¡A comeeeeeer!!!. El cocido está como siempre: para tocarle las palmas. Y encima ese paseito nos ha abierto el hambre.
Cayó casi todo el cocido y pero nadie le había hecho caso a Juan de que trajeran un tupperware para llevarse lo que sobrara. En fin, una lástima.
De postre tarta de arándanos, de chocolate y unas libaciones espirituosas.
Sobre las cinco de la tarde se oculta el sol tras las montañas y nos vamos dentro de la casa donde Nani le mete a la chimenea un cargamento de leña y le prende fuego. Poco a poco los invitados se van yendo, preguntando que para cuando el próximo evento culinario. Paco dice que lo siguiente será un ollón de menudo del que él se encarga. Queda apuntado.
Bueno, pues en resumen un buen día, un ambiente festivo y la meteo que estuvo favorable para que todo saliera bien
Creado por Juan Campllonch